Las finanzas han ido cambiando mucho, de la mano de la globalización y de los avances de la tecnología que estamos viviendo hace algunos años. Por supuesto, mucho ha cambiado de los hábitos de consumo de los usuarios, pero también, de la manera de las entidades de ofrecer sus productos y servicios.
Una tendencia que se viene desarrollando fuertemente en el sector, se trata de las finanzas verdes. Un concepto que tiene que ver con el cuidado del medio ambiente y la economía sostenible, y que va cobrando cada vez más fuerza entre los mercados. Te invitamos a conocer en este artículo todo lo que tienes que saber sobre este concepto, los beneficios y cómo influye dentro de las empresas.
Las prioridades cambian en el sector financiero
El cuidado del medio ambiente y la economía sostenible, son dos conceptos que hoy están evoca de todos y se perfilan como prioridad en distintos foros mundiales, y también en las organizaciones más reconocidas en el mundo.
A medida que han ido pasando los años, y tanto el mercado como las conductas de los usuarios se han ido modificando, podemos decir, que se ha creado una mayor conciencia a la hora de consumir. Es aquí donde entran en juego las finanzas verdes o sostenibles.
El consumo afecta al mundo
Con estas tendencias, ha quedado en claro, que hoy más que nunca, se hace imprescindible pensar y tomar conciencia acerca de los que compramos y vendemos, y a su vez, analizar cómo estas conductas afectan a nuestro entorno en general.
De esta manera, todos los engranajes dentro del sector económico y financiero, apuntan a incorporar alternativas de finanzas amigables con el medio ambiente. Esta es una tendencia que se está dando en el mundo. Descubre a continuación qué son las finanzas sostenibles y la importancia que tienen, en la actualidad, en nuestro planeta.
¿Qué son las finanzas verdes o sostenibles?
Las finanzas sostenibles o verdes, son aquellas que consideran dentro de sus objetivos, aspectos que tienen que ver con los ambiental, social y también de gobernación. Los propósitos que se establecen se orientan a estas temáticas y se tienen en cuenta principalmente a la hora de evaluar y tomar decisiones de inversión.
Sumado a los criterios económicos y financieros, que tradicionalmente se tienen en cuenta para evaluar otras opciones de inversión, se suman los que se relacionan estrechamente con el impacto medioambiental y social de los proyectos. Aquí no solo se tienen en cuenta los beneficios del inversor, sino también en la comunidad en la que se desenvuelve.
¿Cuáles son los criterios que se contemplan?
Como dijimos anteriormente, a los criterios financieros se le agregan los ambientales, los sociales y de gobernanza. Los criterios ambientales se relacionan con el mantenimiento de la calidad de los ecosistemas naturales y de biodiversidad, lo que tiene que ver con el control de las emisiones de gases contaminantes que impulsan el calentamiento global, el tratamiento de residuos, entre otros.
Otros criterios para las finanzas sostenibles
Los mencionados anteriormente, son los que conocemos como proyectos financieramente verdes, que cuidan el medio ambiente. Por otro lado, tenemos los criterios sociales, que tienen que ver con el bienestar e intereses de las comunidades, incluyendo derechos humanos, de salud y seguridad.
En cuanto a los criterios de gobernanza, se refiere a la administración y a las políticas de inversión, incluyendo aspectos que tienen en cuenta la estructura de la dirección de empresas, la ética de negocios, difusión de la información, controles internos, entre otros.
En otras palabras…
Las finanzas que se consideran sustentables, son las que se encargan de analizar cómo la inversión y el financiamiento pueden interactuar con cuestiones ambientales, sociales y de gobernanza, durante un tiempo determinado, sin comprometer los números relacionados con la rentabilidad.
Además de enfocarse en la inversión con conciencia verde o ecológica, el objetivo de este tipo de finanzas es impactar de manera positiva en la sostenibilidad ambiental, pero también de generar utilidades y beneficios sociales, económicos, de gobernanzas y ambientales.
¿Qué tipos de proyectos entrarían dentro de la categoría de finanzas verdes?
Dentro de los proyectos de categoría de finanzas verdes, podemos mencionar algunos de los más populares y reconocidos. Quizás, los que menciones en este momento, son los que actualmente más se ven en desarrollo. Entre ellos:
- Energía renovable.
- Prevención y control de la contaminación.
- Conservación de la biodiversidad.
- Eficiencia energética.
- Iniciativas de economía circular.
- Uso sostenible de los recursos naturales y la tierra.
¿Qué es el bono verde?
Para los que no saben, un instrumento financiero verde en común, es el reconocido bono verde. Actualmente, existe un código de conducta que define y constituye este bono. Para poder calificarse como tal, debe cumplir con los criterios sobre el uso de los ingresos, tener un proceso para la evaluación y selección de proyecto, garantizando la gestión de los ingresos y los informes detallados.
Se estima que, a nivel mundial, el mercado de los famosos bonos verdes podría alcanzar un valor de $2.5 billones de dólares, para el año 2023. China, Francia y Estados Unidos, son los tres mayores emisores de bonos verdes. Estas herramientas, plantean un nuevo paradigma en las finanzas, que permitirán nuevas formas de gestionar finanzas públicas y privadas, para respaldar la transición hacia un futuro sostenible.
La importancia de las finanzas sostenibles
En el mundo de hoy, donde nos encontramos conectados todo el tiempo, las finanzas sostenibles comienzan a tomar una importancia nunca antes vista, sin precedentes. La mayoría de las empresas y proyectos, ya tienen los ojos encima de millones de consumidores que vienen informados hace años, sobre el futuro que se avecina.
En este sentido, cobra importancia, puesto que antes de decidir cómo invertir su dinero en productos o servicios, los consumidores quienes entender cómo afecta la fabricación o implementación de los mismos en el medio ambiente, en las sociedades, y cuáles serán sus efectos a largo plazo.
La decisión de compra de los usuarios hoy, va un poco más allá de las marcas o el precio y se basa en factores cómo de dónde se obtiene la materia prima, si la extracción o disponibilidad del mismo afecta la estabilidad del ecosistema y del medio ambiente. Si lo ofrecido se encuentra enmarcado en un comercio justo, o si la organización respetar los derechos de sus trabajadores, entre otras cuestiones.
Finanzas verdes a la inversión
La misma situación sucede por la parte de los inversores. En este caso, el principal objetivo ya no se enfoca en cuánto dinero se gana, sino que lo que le dan mucha más importancia al cómo, el para qué y a costa de qué generan los ingresos que producen.
Sabemos, que la mayoría de la gente se acerca a las finanzas verdes o sostenibles por convicción, ya que consideran que son necesarias para poder dar solución a muchos problemas del mundo, esta es una tendencia económica mundial que también se inclina y va por el lado de la conveniencia.
Cuando se hacen inversiones con mayor conciencia, se acude a una reflexión y análisis mucho más profundo, que puede terminar en la adquisición de mayores niveles de rentabilidad, y también aporta mucha más estabilidad al negocio y a la economía.
Finanzas sostenibles con Eco Préstamos
En los últimos años, con el desarrollo de la nueva tendencia que crece y crece en finanzas verdes, los bancos han decidido sumarse activamente a esta tendencia hacia las finanzas sostenibles. Por eso mismo, han desarrollado instrumentos de financiamiento sostenibles, o verdes, como las conocidas líneas de crédito verdes, inversiones responsables, bonos verdes, índices de acciones sostenibles, entre otros.
Opciones de Eco préstamos
Uno de los bancos más reconocidos en el mercado argentino, BBVA, fue una de las primeras instituciones en lanzar una línea de préstamos personales destinado especialmente a adquirir bienes sostenibles que contribuyan al cuidado del medio ambiente. Estos son los que conocemos como Eco Préstamos.
Estos préstamos se otorgan con el fin de financiar una causa sustentable. El monto de este tipo de préstamos puede alcanzar un máximo de $4 millones de pesos y no supone ningún costo por la solicitud del mismo. El plazo de devolución de este tipo de préstamos, puede alcanzar 60 meses. Puedes conocer más detalles sobre esta alternativa aquí.
Conclusión
Las finanzas verdes llegaron para quedarse y son el futuro. De ahora en más, tanto consumidores, como inversores y empresas, deberán tener en cuenta este aspecto cuando vayan a realizar negocios, o adquirir bienes y/o servicios.
Las finanzas verdes son una gran alternativa, y una opción que muchos deberíamos considerar. Una nueva era de consumo se avecina, una etapa mucho más consiente y preocupada por las problemáticas más importantes que enfrenta el planeta hoy. Apostemos a las finanzas sostenibles y vivamos en congruencia con el cuidado del medio ambiente.