En los últimos años, más de 5.8 millones de personas en México han tenido problemas relacionados a algún tipo de fraudes financieros. Así lo informa la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef).
Entre los fraudes más habituales en México encontramos la clonación de tarjetas y esquema piramidal. Una de las formas que más se ha desarrollado en el último tiempo.
¿Qué son los fraudes financieros?
Para entender de qué hablamos cuando decimos fraudes financieros, es necesario entender el concepto. Los fraudes financieros son aquellas acciones que una o varias personas llevan a cabo con el objetivo de obtener un beneficio propio, perjudicando de alguna manera la economía de otras personas.
Los fraudes se llevan a cabo a través de distintos método y técnicas, por lo que es fundamental informarse para poder implementar medida de seguridad que protejan las finanzas de cada uno.
Tipos de fraudes
Existen distintos tipos de fraudes, entre ellos, uno de los más reconocidos es el de dinero rápido. Son empresas que en teoría prestan ciertas cantidades de dinero de forma fácil y rápida, por ejemplo, con plazos largos de pago, sin consultar historial crediticio y sin comprobante de ingresos.
Al momento de pensar en conseguir un préstamo con tantas facilidades, es importante verificar la identidad y el registro de la institución que presta en el Buró de Entidades Financiera de la Condusef.
También es necesario comparar varias opciones de crédito, y sobre todo no entregar documentos personales o datos bancarios si no están convencido de que es una empresa seria.
¿Cuáles son los más comunes en México?
Uno de los fraudes más habituales y vistos en México es el de los esquemas piramidales. También conocidos como fraudes a través de redes sociales, que se enfocan en crear cadenas de ahorro, y para que sea atractivas, ofrecen ganancias elevadas.
Algunos de los más conocidos son: la flor de la abundancia, células de gratitud, bolas solidarias, círculos de prosperidad, telar de las mujeres, entre otros.
El funcionamiento de estos consiste básicamente que quien está en la cima de la pirámide o en el centro de la flor, invita a dos personas que a su vez reclutan a otras y así sucesivamente. La aportación siempre se entrega a quien está en la punta y el resto de los involucrado va subiendo de nivel con el objetivo final de llegar a la cima y recibir dinero.
Este tipo de fraudes se vuelven insostenibles en un punto, ya que es imposible seguir agregando eslabones indefinidamente. Cuando la cadena se rompe, quienes aportaron dinero ya no tienen posibilidad de recuperarlo.
Clonación de tarjetas
Otro fraude, y uno de los más populares, es el de la clonación de tarjetas, donde los criminales sacan los datos de una tarjeta para realizar compras por internet. Muchas veces solo se requiere de los dígitos de la tarjeta, la fecha de vencimiento y el código de seguridad CVV de la misma.
También se suelen reportar transferencias electrónicas o retiros no reconocidos, o robo de identidad y la falsificación de datos personales, fraudes en cajeros, hasta incluso malas prácticas en la que personas se hacen pasar por asesores para robarte los datos financieros.
